“Nuestros alumnos se merecen al mejor docente que llevamos dentro”
Metodologías Activas en IES AlqueríaS
"Todos somos genios pero si juzgas a un pez por su habilidad de trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil” (A. Einstein)
NUESTROS PROYECTOS
En esta sección iremos publicando los proyectos y tareas competenciales que vamos desarrollando.

El proyecto MAAS surge con la intención de atender a varias necesidades pedagógicas, organizativas y legales. La primera pasa por atender a nivel legal, las recomendaciones y orientaciones metodológicas del Real Decreto 1105/2014, de 26 de diciembre, por el que se establece el currículo básico de la Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato, Decreto 220/2015 y Decreto 221/2015 por el que se establece el currículo de ESO y Bachillerato, respectivamente, en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, así como la Orden ECD/65/2015, de 21 de enero, por la que se describen las relaciones entre las competencias, los contenidos y los criterios de evaluación de la educación primaria, la educación secundaria obligatoria y el bachillerato.
El profesorado se enfrenta a un cambio metodológico, lejos de las tradicionales clases magistrales y evaluaciones a base de exámenes escritos y trabajos, únicamente. Se trata de hacer frente a un currículo basado en competencias, donde el desarrollo de todas las competencias clave debe estar presente en el día a día del proceso de enseñanza-aprendizaje. Las propuestas educativas deben atender a las exigencias curriculares, demandas y motivaciones de nuestros adolescentes. Sin duda, este cambio metodológico no es fácil y requiere de un esfuerzo adicional y formación del profesorado, sin embargo los principales beneficiados serán los estudiantes (Perrenound, 1999; Trujillo, 2012).
El currículo escolar actual basado en competencias como eje del proceso educativo, implica la utilización de metodologías que afectan tanto a la manera de enseñar del profesorado como a la manera de aprender del alumnado, favoreciendo el uso de metodologías activas, contextualizadas e interactivas, que faciliten la participación e implicación del alumnado y la adquisición y uso de conocimientos en situaciones reales, realización de actividades integradas que permitan a los alumnos avanzar hacia los resultados de aprendizaje de más de una competencia al mismo tiempo, fomento de la reflexión e investigación, así como la realización de tareas que supongan un reto y desafío para los alumnos (artículo 16 del Decreto 220/2015, por el que se establece el currículo de ESO en la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia y de acuerdo con las competencias atribuidas en el artículo 6 bis 2.c).3.º de la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, y las orientaciones para facilitar el desarrollo de estrategias metodológicas recogidas en el anexo II de la Orden ECD/65/2015, de 21 de enero).
Por otro lado, la neurociencia ha demostrado que el uso de este tipo de metodologías, donde el alumnado es el protagonista activo de su proceso de aprendizaje, contribuye a la liberación de ciertos neurotransmisores asociados a la motivación, tales como la dopamina, contribuyendo con ello a la mayor implicación del alumnado en los procesos de enseñanza-aprendizaje y por tanto, un beneficio en sus resultados académicos.
A diferencia de lo que creíamos años atrás, el cuerpo no es simplemente un aparato de comunicación bidireccional para el cerebro, sino que desempeña un papel crucial en los procesos cognitivos (cognición corporizada). O si se quiere, los sistemas sensoriales y motores que gobiernan el cuerpo están enraizados en los procesos cognitivos que nos permiten aprender. Parafraseando a Giacomo Rizzolatti, descubridor de las neuronas espejo: “El cerebro que actúa es un cerebro que comprende”. Las implicaciones educativas son enormes porque, además, el aprendizaje es un proceso social[1].
También se ha puesto de manifiesto como la actividad física favorece el desarrollo y funcionamiento del cerebro, así como los procesos atencionales. Gracias a la neurociencia sabemos que al realizar ejercicio físico, el cerebro libera dopamina, oxitocina y noreprinefina, además de aumentar la plasticidad cerebral y volumen del hipocampo (centro del aprendizaje y memoria), provoca un efecto positivo sobre el factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF), una de las sustancias que contribuyen al crecimiento de nuevas neuronas y sinapsis, y aumenta la capilarización y flujo sanguíneo a nivel cerebral (Rasberry et al. 2011, Ardoy et al. 2014; Erickson et al. 2015, Jaakkola et al. 2015, Hillman et al. 2017).
La oxitocina es una hormona involucrada en la formación de relaciones de confianza y generosidad, al que también se es muy sensible en la adolescencia, lo que hace tan gratificante las relaciones sociales en esta edad (Pellicer et al. 2015). Por su parte, la norepinefrina, estudiada para entender el humor, tiene un efecto potenciador de la atención, la percepción, la motivación y la excitación (Ratey, 2008). Ambos neurotransmisores se generan mientras jugamos, hacemos actividad física o nos involucramos en un reto o proyecto común.
Los beneficios cognitivos del ejercicio físico en la infancia y en la adolescencia tanto a nivel cardiovascular como neuro-cognitivo, hoy día es una evidencia científica. Por tanto, la promoción e incorporación de tiempos extra de actividad física durante la jornada escolar, contribuiría al aumento del tiempo de actividad física, acercándonos a los sesenta minutos diarios recomendados, y con ello, a la mejora del rendimiento cognitivo y académico de los estudiantes, además de su salud cardiovascular.
Se pretende llevar a cabo un proyecto que integre formación y autoformación del profesorado e implementación de diferentes metodologías activas, entre las que destacamos: Aprendizaje cooperativo, Aprendizaje basado en problemas (ABP), Aprendizaje por proyectos (APP), Flipeed Clasroom (clase invertida), Aprendizaje basado en el juego, ludificación o gamifiación y Aprendizaje servicio. También incorporaremos tiempos extras de actividad física durante la jornada escolar de forma interdisciplinar en asignaturas que no son Educación Física, durante los recreos, en actividades puntuales y mediante la promoción del desplazamiento activo (ir y venir al cole). Crearemos una compañía de teatro y artes escénicas, así como material didáctico para replicar nuestros proyectos en futuros cursos académicos y así poder darles continuidad
[1] Jesús C. Guillén (31 de marzo de 2017). https://escuelaconcerebro.wordpress.com/tag/neuronas-espejo/​
Objetivos
​​Para el profesorado
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1. Profundizar en el conocimiento de metodologías activas.
2. Conocer los beneficios neuroeducativos de usar metodologías activas sobre el proceso de aprendizaje.
3. Diseñar y poner en práctica tareas competenciales y proyectos interdisciplinares.
4. Promocionar estilos de vida saludables como base del aprendizaje y desarrollo óptimo del cerebro.

Para el alumnado
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1. Crear conciencia sobre la interculturalidad.
2. Mejorar la convivencia del centro, tanto dentro como fuera del aula.
3. Sensibilizar sobre el cuidado de la salud física, psicológica, social, emocional e interior.
4. Mejorar la motivación por el aprendizaje, lo que nos llevará a una mejora del rendimiento escolar.

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Modelo de Responsabiliad Personal y Social de Hellison.
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El Modelo de Responsabilidad Personal y Social (en adelante, MRPS) es considerado uno de los modelos de enseñanza existentes, que junto a la Instrucción Directa, Aprendizaje Cooperativo, Educación Deportiva, Sistema Personalizado de Enseñanza, Enseñanza entre Iguales, Enseñanza mediante Preguntas y Enseñanza Comprensiva constituyen los modelos pedagógicos más conocidos y usados en la Educación Física actual. Sin embargo, estos modelos se están adaptando y cada vez más, es frecuente encontrarlos en otras asignaturas, como es el caso del MRPS de Hellison.
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El MRPS surge con el propósito de desarrollar un modelo de enseñanza para las clases de Educación Física, que estimule la autonomía y responsabilidad, la resolución de problemas, la toma de decisiones, buscando un enfoque competencial y contextualizado, que involucre al alumnado en su proceso de formación y por tanto, en la evaluación.
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La existencia de una sociedad cada vez más carente de valores ha suscitado gran interés en la comunidad científica en busca del desarrollo personal y social de los jóvenes en el ámbito educativo que permitan revertir sus esfuerzos en conseguir una sociedad mejor. Una forma de promocionar y educar en valores es a través de la responsabilidad. Diversos autores han empleado modelos de enseñanza y programas de intervención para proporcionar y favorecer responsabilidad entre el alumnado, utilizando la actividad física y el deporte como medio de transmisión de esos valores. Uno de los modelos más implementados y estudiados que aboga por esta filosofía es el MRPS, el cual utiliza la actividad física como herramienta pedagógica para buscar el desarrollo integral de los estudiantes, basado en la promoción de responsabilidad por parte del docente y el aprendizaje de sus valores asociados por parte de los discentes, cimentado en una creciente toma de decisiones, posibilidad de elección y autonomía.
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Numerosos estudios e investigaciones han demostrado la eficacia de este modelo para fomentar valores como el respeto, autocontrol, esfuerzo, mejora personal, autonomía y liderazgo así como la influencia de su implementación en otras variables como la autoeficacia, conductas prosociales, deportividad, violencia o calidad de vida en diferentes contextos de aplicación.
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¿Cuál es la finalidad del MRPS? El desarrollo de la responsabilidad, utilizando la actividad física como medio para su consecución, es la finalidad principal de este modelo desarrollado por Donald Hellison en los años setenta.
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¿Cuándo surge y por qué? Surge como un programa dirigido a jóvenes y adolescentes en riesgo de exclusión social y en un intento de potenciar el desarrollo de sus capacidades, valores y comportamientos, tanto en el deporte como en la vida cotidiana.
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Posteriormente y dada su eficacia en el desarrollo de valores asociados a la responsabilidad personal (esfuerzo y autonomía) y a la responsabilidad social (respeto a los sentimientos y derechos de los demás y capacidad de escuchar y ponerse en el lugar de los otros), comienza a ser implantado en otros contextos, siendo actualmente objetivo de interés e investigación en el área de la Educación Física, en aras de una Educación Física de calidad.
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¿Qué busca el MRPS? Este modelo persigue la transmisión de valores, respeto, esfuerzo, autonomía, liderazgo, ayuda a los demás y transferencia a la vida en sociedad.
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¿Cuál es la estructura de este modelo? El MRPS posee una estructura clara y bien definida de las sesiones, diferenciando en niveles de menor a mayor complejidad la responsabilidad y autonomía. En lugar de explicar la estructura y niveles en este apartado del tema, lo analizaremos en el siguiendo, proponiendo ejemplos prácticos para un mejor entendimiento del modelo.
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+ Nivel 0: conductas y actitudes irresponsables.
+ Nivel I: respeto por los derechos y sentimientos de los demás.
+ Nivel II: participación y esfuerzo.
+ Nivel III: Autonomía personal.
+ Nivel IV: Ayuda a los demás y liderazgo.
+ Nivel V: Transferencia fuera del contexto deportivo-educativo.
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